En el terrado del Museo de la Civilización Islámica de Sarja, un emirato próximo a Dubái, se descubre el cadáver de Salma Al Hashimy, una empleada que nadie ha echado en falta y de la que nadie lamenta su muerte. Hessa Al Falasi, una joven abogada dubaití, sospecha que este suceso podría estar relacionado con algunos hechos extraños que están ocurriendo en el museo. De todo ello la ha puesto al corriente Lubna, su hermana mayor, confinada por razones médicas en un ático de un rascacielos cercano. La joven abogada, cubierta con un velo y una abaya, la túnica negra típica de su país, se verá inmersa en una investigación que tendrá que compaginar con la defensa de sus clientas en el Tribunal de la Sharía, sus oraciones en la mezquita y, también, con la preparación de su gran boda, una celebración que deberá colmar las expectativas de su familia y del resto de la sociedad emiratí.
Forma parte de una serie de novelas de intriga cuya protagonista es Hessa Al Falasi, una joven abogada dubaití que cubierta con la abaya, la túnica negra típica de su país, sumerge al lector en un mundo donde los rascacielos y la tecnología más puntera se entremezclan con las tradiciones milenarias y el cumplimiento de los preceptos del Islam.
A parte de ser una muy buena novela negra, el libro nos regala también un viaje a través de los Emiratos Árabes, un país en una búsqueda constante del equilibrio entre su espectacular desarrollo y sus tradiciones milenarias.
Gema García-Teresa. Nació en Barcelona, donde reside en la actualidad. Médico de profesión y especializada en Farmacología Clínica, ha desarrollado su carrera profesional en la industria farmacéutica. También ha impartido clases en la Universidad y en másteres del sector. Su afición viajera le despertó una fuerte atracción por la cultura árabe, que derivó en el estudio de su lengua y en el escenario de sus primeras novelas: los fascinantes y contradictorios Emiratos Árabes. Su primer libro es Muerte en el Burj Khalifa.