Vuelve uno de los tándems más potentes de la LIJ estatal, formado por Mónica Rodríguez y Federico Delicado, con un breve retrato de la infancia de Joan Miró: su vida en Barcelona y su primer viaje a Mallorca, lleno de emociones, colores y descubrimientos fascinantes.
El libro trata la relación entre Joan y su abuela Josefa, que le enseña que, al contrario de lo que le dice su padre, tener la cabeza llena de pájaros no es nada malo, y que para dejar volar su imaginación primero debe aprender a aceptarse a él mismo y a su vocación de artista.
Un libro para aceptarnos tal y como somos, y para aprender a observar el mundo desde una mirada artística y poética.
Este libro sigue la línea de Las cosas de Federico: pequeñas historias con las que pretendemos acercar nuestros genios universales a los niños para que tengan una visión literaria de cómo podían vivir su infancia.